VILMA ALANOCA, MINISTRA DE CULTURAS Y TURISMO:

“Se ha declarado a Bolivia como el
mejor destino turístico del mundo”

Expertos de Francia trabajan en el país para, entre otras cosas, hacer que Tiwanacu se convierta en un museo de referencia internacional.
Del mismo modo, en el Salar de Uyuni habrá faros ultrasensibles y de gran alcance, similar a los que guían en el mar a los barcos, para mitigar el extravío de turistas en la zona.
Esas y otras revelaciones importantes las realizó la Ministra de Culturas y Turismo, en una entrevista con LIBRE EMPRESA.

Entendemos que en su gestión y para el gobierno, el tema de la Alasita, que será reconocido por la Unesco, como patrimonio intangible de la humanidad, está avanzando.
Así es, el trabajo que se ha cumplido por parte de la Unidad de Arqueología y Museos del Ministerio -apoyando la labor de los artesanos en La Paz-, esta postulación presentada a la Unesco bajo el nombre de Recorrido de los Rituales de la ciudad de La Paz, está en su etapa final.
En este sentido, entre el 5 al 9 de diciembre próximos se va a dirimir en la 12ava reunión anual del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda Cultural y Material de la Unesco, que tendrá como sede la ciudad de Gehu, Corea del Sur. Allí, precisamente vamos a defender bajo la responsabilidad del Ministerio de Culturas y Turismo, la inscripción a la postulación de la Alasita en la lista representativa de Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad Ante la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (Unesco). Esta es la etapa final.

¿Cuándo comenzó el proceso?
El año 2015, cuando se inicia con la presentación de todo el expediente. En ese sentido, el último viaje que realizamos este pasado 21 de noviembre, a efectos de presentar el Dakar, también sirvió para estar presentes en la sede de la Unesco, en París, y allí sostuvimos una reunión con todo el comité para exponer un video y una presentación oral sobre lo que es la Alasita y la trascendencia que tiene para la cultura boliviana.

¿Qué implica dirimir?
Es la etapa final donde el Comité de la Unesco aprobará o reprobará la postulación de Bolivia con la Alasita. De hecho, sin embargo, ya aprobamos en un 50 por ciento con la presentación del expediente, es decir, la presentación antropológica que respalda la cosmovisión andina sobre la Alasita.
Resta ahora concretar el otro 50 y entonces estamos alistando una presentación espectacular sobre la Alasita al comité que está conformado por 15 países y se reunirán sólo para considerar este tema y ellos tendrán que hacer conocer su veredicto final.
Entonces, haremos en Gehu una presentación de video de dos minutos y luego tendremos casi el mismo tiempo para exponer oralmente y defender la postulación de la Alasita.

¿Qué importancia tiene para La Paz y Bolivia que la Unesco reconozca a la Alasita?
Es importante porque en el gobierno recuperó con el Estado Plurinacional, la práctica y la revalorización de nuestras tradiciones y reconocerlos a nivel internacional traerá beneficios adicionales en lo cultural y en lo turístico.
Bolivia definitivamente es un país único. No olvidemos que recientemente fueron nominados como el mejor destino turístico del mundo. Existe mucha inquietud en el mundo de conocer nuestra cultura, nuestras tradiciones.

Sobre la base de estas percepciones ¿está convencida que la Alasita calificará?
La visión que tenemos es muy positiva. No estamos plenamente confiados, pero el trabajo que hizo la Unidad de Patrimonio fue prácticamente imbatible. Además, un tema que se debe subrayar es que no sólo es la Alasita, como tal, sino la presencia de un Jefe de Estado indígena que, por supuesto, trascendió las fronteras. Por lo que considero que vamos a tener buenos resultados el próximo año.

Hablando de La Paz, la Festividad del Gran Poder también busca ser declarada patrimonio inmaterial de la humanidad. ¿Cómo avanza eso?
El expediente también fue elaborado en el Ministerio en esta gestión en forma maratónica, porque tenemos la necesidad de reforzar lo que somos como país, es decir, porque nos declararon el mejor destino turístico del mundo. Lo que estamos haciendo es resguardar el patrimonio inmaterial, en ese sentido no sólo el Gran Poder es una fiesta, sino es más profundo antropológicamente. Hablando de cada una de las danzas, de la música, de la vestimenta andina que deriva de nuestra propia historia.
 
¿Cómo están las gestiones al respecto?
Va a llevar su tiempo, porque la Unesco tiene plazos que cumplir, pero a través de nuestra representación ante esa instancia supranacional se ha remitido una carta por la cual se exhorta a la ONU poder agilizar el proceso para declarar al Gran Poder, también patrimonio inmaterial de la humanidad.
En ese sentido, esperamos que hasta finales de 2018 podamos recibir la primera respuesta de la Unesco, porque el expediente enviado en julio de este año será revisado, y es natural que sea así.

¿Qué otros planes de acción puso en marcha su Ministerio para revalorizar el patrimonio cultural del Estado e incentivar, en paralelo, el turismo en Bolivia?
Sobre todo en La Paz, estamos haciendo muchas acciones y consolidando proyectos. En la región se ha trabajado sobre todo en el Lago Titicaca, que conlleva preservar nuestras culturas vivas.
En ese sentido, estamos revalorizando culturas ancestrales como los Chiripas y la Tihuanacota. En ese sentido, estamos invirtiendo para mejorar el Museo de Tiwanacu, para que el turista tenga más comodidad y pueda conocer, mejor, el alcance y significado que tuvieron en el mundo esas civilizaciones antiguas.
Tiwanacu albergará un nuevo museo de corte internacional.

¿Qué se hizo en Tiwanacu?
En Tiwanacu, haremos un nuevo museo. Pondremos al servicio de la población nacional y el turista del mundo, un centro moderno, interactivo, que no tendrá nada que envidiar a otros que existen casi similares en el exterior.
En ese sentido, ya llegaron dos museólogos de Francia, con apoyo de la Unesco, para que podamos presentar un proyecto a diseño final para el nuevo museo. Trabajos, definitivamente, contra el tiempo.
Las ruinas de Tiwanacu ahora están iluminadas y desde diciembre se podrán hacer las visitas y paseos nocturnos que incluirán una lectura de estrellas a cargo de los Mallkus que viven y vivieron desde siempre en las ruinas. Vamos a contar, definitivamente, los saberes ancestrales.
También el museo cuenta ahora con un moderno laboratorio donde se están analizando miles y miles de piezas milenarias que tenemos. Hacemos investigación propia. Ya no tenemos necesidad de llevar afuera el patrimonio.

¿Las obras en Tiwanacu ya comenzaron?
Ya empezó gracias a la Unesco. Ya fueron contratados los dos museólogos que van a trabajar en este moderno diseño.

¿Un proyecto a corto o mediano plazo?
Yo espero que de aquí a dos años ya podamos consolidar este proyecto, incluso con infraestructura avanzada, no será sencillo porque estamos buscando que sea un museo de alta referencia mundial.
¿Por qué digo esto?, debido a que recién descubrimos con ayuda de drones infra rojos que las ruinas de Tiwanacu se extienden al menos 150 hectáreas más, es decir, lo que se conoce hoy, sólo es una muestra. Lo que viene ahora es mucho más espectacular, porque hay una extensión territorial que se hallan soterradas en la zona y llega incluso a la propia ciudad, incluso, la carretera que une La Paz con la población del Desaguadero.

¿Qué trabajos están haciendo al respecto?
Un diagnóstico para saber qué tipo de estructuras existe en el área. Vamos a hacer unas excavaciones muy puntuales y hasta fin de mes vamos a realizar una presentación en el Ministerio de Culturas para mostrar los alcances que tienen las nuevas ruinas de Tiwanacu, que de hecho es enorme y de alto impacto.

¿Qué otras cosas están en marcha?
Nuestro plan de acción se llama Revolución Cultural. Como parte de este proceso, se ha declarado a Bolivia como el mejor destino turístico del mundo. Este reconocimiento internacional será entregado al Estado el próximo 10 de diciembre en la República de Vietnam, que es sumamente importante. Estamos acelerando la promoción internacional. Estamos promocionando al país en todo sentido.

¿Cuáles son los planes para el próximo año?
Vamos a trabajar en 2018 en varias lugares del país. Estaremos en Tiwanacu, el Lago Titicaca, en el Carnaval de Oruro, la ruta de las Aguas Termales, también en Oruro, en Salinas de Garci y Mendoza, pues es una ruta obligada que lleva al Museo de la Revolución Cultural y Democrática de Orinoca, también en Oruro.
También revalorizaremos a la cultura milenaria de los Uru Chipayas, llegaremos hasta el Parque Nacional Sajama, que tiene ahora todas las comodidades modernas y tecnológicas.
 
¿En el Salar de Uyuni, que proyecto está en marcha?
No sólo en el Salar de Uyuni, sino también en las Lagunas Colorada y Verde. El Ministerio tiene previsto invertir 26,5 millones de dólares, para diversos proyectos que van desde faros, para el caso del salar, que serán enormes para que la gente no se pierda, y la implementación de una escuela hotelera de alta gama.
El museo de Toro Toro, en Potosí, también es objeto de atención prioritaria para el Ministerio. Asimismo, la ruta de los forajidos Butchs & Cassidy, durante el siglo XIX, ubicado en Tupiza, será también objeto atractivo turístico para el mundo.