O3, la fórmula segura para reutilizar el agua
Aquakit, un emprendimiento de un profesional cochabambino, aplica tecnología de ozono para la purificación de agua
Purificar el agua para el consumo humano o reciclar para cubrir otras necesidades del hogar, hoy es posible gracias a la tecnología de ozono que una innovadora empresa, “Aquakit”, está implementando en Cochabamba.
“Se trata de una tecnología que recurre al ozono como un poderoso desinfectante que es 600 veces más eficaz que el cloro en la eliminación de las bacterias, gérmenes y hongos”, explica Juan Carlos Escóbar Méndez, Gerente de Aquakit.
El ozono es un gas que se forma cuando el oxígeno es expuesto a una alta intensidad de luz ultravioleta (como sucede en las capas superiores de la atmósfera) o a un campo de alta energía (llamado descarga corona), capaz de disociar los dos átomos que lo componen y dar lugar a una nueva molécula triatónica de oxígeno, explica.
Luego, agrega, el ozono (O3) se incorpora al agua en forma de burbujas y al entrar en contacto con la materia orgánica la desintegra transformándola en gas, bajando así el nivel de contaminación de las aguas para su purificación.
“Aguas grises”
Las aguas jabonosas que provienen de la ducha, lavamanos, lavandería y lavarropas, denominadas “aguas grises”, a través de una red interna domiciliar son conducidas al sistema de purificación. Se excluyen los líquidos de los inodoros porque tienen carga fecal, al igual que aguas de la cocina porque contiene una elevada concentración de grasa y restos de alimentos.
Una vez purificada el agua con la tecnología de ozono, el líquido se almacena en un tanque separado y puede reutilizarse para el riego de los jardines, el aseo del vehículo, para llenar los tanques del inodoro, limpiar los pisos y patios, pero no para la ingesta humana.
Escobar Méndez hace notar que de toda el agua que consume una familia, entre el 40 a 50 por ciento puede ser reutilizada y no desechada por la alcantarilla, desperdiciando así un recurso escaso y valioso que puede ser reutilizado.
“Las aguas residuales domésticas no pueden ser consideradas como un desperdicio, al contrario, deben ser canalizadas como fuentes accesibles y sustentables de agua, energía y nutrientes”, dice al mencionar que la tecnología de purificación del ozono es muy confiable, robusta y sencilla de instalar en domicilios.
Plantas modulares
Aquakit ofrece plantas de tratamiento modulares de fácil instalación, automatizadas y con un bajo consumo de energía para la purificación de “aguas grises”. Estas instalaciones no ocupan mucho espacio y pueden llegar a costar cerca de $us 1.500 para una familia tipo, de cinco miembros. Se trata de una única inversión para más de 10 años y tras cinco años de uso se puede hacer una inversión mínima de unos $us 150 en su mantenimiento y prolongar su buen funcionamiento por otros cinco años.
A poco de cumplir un año de funcionamiento, Aquakit logró implementar en Cochabamba diez sistemas para purificar aguas grises con la tecnología de ozono.
La idea de implementar el sistema de reutilización del agua, relata Escóbar, surgió en 2015 en Argentina. Por entonces, el joven ingeniero se encontraba trabajando en un proyecto de petróleo y gas, y fue en esa ocasión que conoció una empresa que se ocupaba del tratamiento de afluentes en los campamentos petroleros en base a ozono.
La innovadora tecnología llamó mucho la atención del ingeniero cochabambino que decidió conocer más al respecto, investigar y capacitarse; tras descubrir su funcionamiento y sus bondades, decidió retornar a Bolivia para adaptar este sistema a nivel domiciliar.
“Considero que al implementar esta novedosa tecnología en Cochabamba, Aquakit no sólo está innovando, sino contribuyendo en algo a nuestro país y a nuestro planeta en el buen uso del recurso renovable que cada vez es más escaso”, reflexiona.
De gris a negro
Otra solución que Aquakit está poniendo en ejecución es el tratamiento de las “aguas negras” en lugares donde no existe la red de alcantarillado público y donde utilizan los pozos sépticos que terminan contaminando los acuíferos.
Aquakit ha implementado dos plantas de tratamiento de “aguas negras”, una en Tiquipaya y otra en Sacaba. El primero corresponde a un centro de eventos y el otro una unidad educativa fiscal. En ambas se están tratando y reutilizando las “aguas negras” de los baños para el uso en riego y forestal.
“Previamente, las aguas se someten a procesos biológicos para bajar su nivel de contaminación y finalmente se aplica la tecnología de ozono para terminar de depurar esas aguas, que finalmente se aprovecha para el riego forestal y de jardines”, explica.
Agua para consumo
Este sistema de purificación también ha sido aplicado a las aguas de pozo propias de un edificio multifamiliar. Las aguas de vertiente o pozo que puedan tener contaminación microbiológica (coliformes, bacterias etc.) son sometidas al ozono para la total eliminación de estos patógenos y que puedan servir para el consumo humano sin riesgo para la salud de los residentes.
Según datos de Aquakit, el consumo per cápita diario de agua potable en Bolivia llega en algunos sectores hasta 300 litros, cantidad que sobrepasa los 80 litros diarios recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estos datos reflejan la cantidad de agua que se desperdicia en el país.
“En una ducha de diez minutos gastamos fácilmente 100 litros de agua, recurso que perfectamente se puede depurar y reutilizar para evitar que se vaya por la cloaca a colapsar las plantas de tratamiento. Si esta tecnología se aplicara en edificios donde hay hasta 40 familias y que cada unidad familiar pueda recuperar 8 mil litros al mes, estamos hablando de 320 mil litros de agua recuperada”, sostiene.