Santa Cruz concentra el 60% de las franquicias en Bolivia

El crecimiento en los últimos años ha sido acelerado, al punto que hasta la fecha hay 300 marcas que operan en el país. Alrededor de 110 pertenecen al sector alimenticio.

Las franquicias más frecuentes en el país están enfocadas al sector gastronómico, específicamente aquellas relacionadas a las comidas fast food (comida rápida), que son las más numerosas y también las más visitadas. Sin embargo, también comienzan a crecer las franquicias extranjeras del sector moda, de diversos tipos y para diferentes segmentos de compradores.

Entre algunas de las que se establecieron exitosamente en Santa Cruz están Starbucks, Burger King, Subway, Pizzas Hut, Wendy’s, Kentucky Fried Chicken, Hard Rock Café, Hooters, entre otras.

El presidente de la Cámara Boliviana de Franquicias (Cafran), Oliver Viera, explica que este rubro en Bolivia se encuentra en pleno crecimiento y expansión, puesto que indicadores macroeconómicos como el crecimiento sostenido del Producto Interno Bruto (PIB) convierten al país en un atractivo para los inversionistas extranjeros, ya que es un mercado en constante expansión y su desarrollo aún no ha llegado a la madurez comercial. 

“Sin embargo, la coyuntura política del país complica un poco el ambiente laboral de las empresas y frena la inversión”, señala.

Inversiones considerables

Una franquicia es un acuerdo comercial o contrato establecido entre dos partes: el empresario, cuya marca es exitosa en el mercado, y por otro lado el emprendedor, que desea invertir para adquirir el derecho de usar la marca y la fórmula del negocio por un determinado tiempo para obtener mayores ganancias. 

En esa relación, el empresario exitoso es el franquiciante que brinda la marca y el secreto de su negocio al emprendedor que llega a ser el franquiciado, a cambio de un pago monetario.

Las franquicias de formato medio tienen un canon inicial, indica Viera, entre $us 10.000 a 50.000 y cuya inversión total no supera los $us 100.00. Algunas franquicias locales de formato pequeño tienen un canon inicial menor a $us 10.000.

El monto total de la inversión que se realiza queda en el absoluto secreto, bajo el paraguas del acuerdo de confidencialidad que suscribe tanto el franquiciante como el franquiciado, ya que además del pago inicial está el pago de los royaltys, las cuotas mensuales sobre las ventas brutas y las renovaciones de las marcas que pueden ser anualizadas o por otro lapso, dependiendo del contrato.

También está la exigencia de estas marcas que el establecimiento quede dentro de un centro comercial de alta rotación. Elizabeth Bowles, de la empresa SurPlus Bolivia, dedicada a las franquicias, explicó en un reportaje anterior realizado por LIBRE EMPRESA, que las franquicias exigen estar en un lugar con alta concentración de personas, que sea seguro y que tenga un alto flujo de consumidores.

Manifestaba que las franquicias pueden expandirse a otras ciudades, porque todas tienen plan de expansión, pero que se necesita de consumidores maduros, dispuestos a pagar por un producto o servicio que tenga la marca internacional.

La primera en Bolivia

Bolivian Foods opera la franquicia Burger King desde 1999 de forma ininterrumpida, el primer restaurante se abrió en la ciudad de Santa Cruz, el segundo en La Paz, para posteriormente ampliar la cobertura a Cochabamba.

Fundada en 1954, Burger King® es la segunda cadena más grande del mundo de comida rápida de hamburguesas. Hogar original del Whopper®, el sistema Burger King® opera en más de 14.000 restaurantes, sirviendo a más de 11 millones de consumidores por día en 100 países alrededor del planeta. 

“Bolivia no podía quedar de lado con el crecimiento de las franquicias a nivel mundial, por lo que se trajo la marca para dar una nueva opción culinaria al mercado boliviano, como también un apoyo con la generación de empleos directos e indirectos”, señala Carlos Camacho Capriles, gerente nacional de operaciones y mantenimiento de Bolivian Foods.

Bolivian Foods S.A. tienen alrededor de 520 colaboradores y sólo en la marca Burger King tiene a 410 personas. Esta empresa boliviana opera Burger King bajo la modalidad master franquicia, además de tener cinco franquicias de Subway: tres en La Paz y dos en Santa Cruz.

El modelo de franquicia de Subway es diferente porque no aplica la master franquicia, sino franquicias individuales por cada tienda; en el caso de ACO (Alimentos Congelados), también de Bolivian Foods, es una división de importación de productos congelados, que trabaja para las dos marcas.

Camacho expone que el restaurante Subway próximo a abrirse en Cochabamba pertenece a los socios del Grupo Link, dueños de los establecimientos de venta rápida llamados Stop & Go y que también traen artistas para conciertos. “Están un poco demorados, ya que tenían que abrir en el primer trimestre, de acuerdo al agente de desarrollo de Subway la apertura está programada para la segunda quincena de abril, si todo les sale de acuerdo a lo programado”, revela Camacho Capriles.

Respecto a los obstáculos iniciales, precisa que “los retos iniciales han sido muchos y sin duda hemos tenido obstáculos que hemos podido sobrepasar. Creo que el reto más grande y constante es mantener la calidad en el servicio, la diversidad en productos, las oportunidades de ofertas y promociones y seguir brindando la mejor experiencia a los invitados que llegan a Burger King. El mercado boliviano es exigente, diverso y dinámico y en estos 20 años hemos seguido creciendo y apostando en el país”.

En cuanto a planes de expansión, Burger King está constantemente analizando nuevos mercados y oportunidades en otras ciudades del país para poder llevar la marca Burger King y seguir creciendo; el último restaurante que abrió fue a finales de agosto de 2018 en Santa Cruz, en la zona de Las Palmas.

¿Retorna Mc Donalds?

Si bien muchas cadenas probaron suerte en Cochabamba, algunas con éxito, como Burger King, a otras no les fue tan bien, como sucedió con Mc Donalds, que cerró sus operaciones y que según una fuente que prefirió mantener su nombre en reserva, será muy dudoso que vuelva a Bolivia, porque las exigencias de la cadena son altas.

Entre ellas es que al establecerse en un país, deberá colocar por lo menos cinco restaurantes al inicio de sus actividades, con grandes inversiones, donde, por ejemplo, tan solo para el equipamiento de una cocina se necesita alrededor de un cuarto de millón de dólares.

Por otro lado, exige que los franquiciantes, al cabo de cinco años, hayan abierto más restaurantes que su competencia directa. Se rumorea que un empresario cruceño estuvo en tratativas, aunque sin llegar a buen puerto.

Hooters en Cochabamba

Hooters es el nombre comercial propiedad de dos cadenas de restaurantes estadounidenses: Hooters of America, Inc., establecida en Atlanta, Georgia, y Hooters, Inc., con sede en Clearwater, Florida. Es una marca de cena casual que tiene más de 30 años en el mercado estadounidense.

En febrero colocó un anuncio en las redes sociales bolivianas que decía ¡Atención Cochabamba! ¿Tienes lo que se necesita para ser una #Chica Hooters? ¡Sé una chica Hooters de fama mundial!, pidiendo el envío del resumen de vida a una dirección. 

Las chicas Hooters, de impresionante belleza física, han sido el emblema de esta marca, pero el Brand Manager de Hooters Bolivia, Jorge Castillo, indica que desde inicios del año 2000 se está cambiando la imagen de las chicas por anfitrionas amigables y cordiales, más que por sus atributos físicos.

En el ambiente preparado en Cochabamba, donde se ha invertido en el equipamiento de la cocina alrededor de $us 350 mil, según revela el arquitecto Mijail Mercado, trabajarán 62 personas en planta y 18 en cocina.

El menú se adecuará a la región y se enfocará en la gran gama de alitas con doce tipos de salsas y aderezos, hamburguesas, camarón y tilapias. Asimismo, ofrecerá 18 bebidas emblemáticas, preparadas según receta.

“Hemos traído a 12 capacitadores de México, Costa Rica y Estados Unidos, quienes durante 20 días han capacitado al personal de cocina, a las chicas y a las personas que hacen la caja”, apunta Castillo, quien al tiempo exterioriza que abrirán otra sucursal, en un par de meses, en La Paz.

Café Martínez

Este negocio fue fundado en 1933, en Argentina. La marca cuenta con más de 80 años de trayectoria en el mercado, que la posicionan como líder en cafeterías gourmet. Posee más de 160 sucursales en la Argentina y 17 sucursales en España, Uruguay, Paraguay, Dubái, Estados Unidos y Bolivia.

La representante legal en Bolivia, Ximena Ibáñez, expresa que Bolivia es una de las plazas más importantes de América del Sur con un fuerte potencial en el mercado gastronómico y con un gran crecimiento económico en los últimos años. 

“El mercado boliviano siempre estuvo dentro de los objetivos de expansión de la compañía y a fines de 2016 se combinaron, por un lado, el deseo de la marca de llegar a esta plaza y, por otro lado, un master franquiciado con los mismos valores y visión de negocio que Café Martínez,  que permitió el próximo desembarco de la marca en el país”.

La franquicia tiene un plan inicial de expansión de tres sucursales en Santa Cruz, para luego abrir sucursales en el resto del país y dar paso a la comercialización de sub-franquicias, con un potencial de doce sucursales a nivel nacional. 

Su primera sucursal está en el mall Beauty Plaza de la capital cruceña, abierta el año 2018. En el transcurso de este año se abrirá la segunda sucursal y para el 2020 se tiene prevista la apertura de la tercera.

Por otra parte, continúan las conversaciones con diversos desarrolladores en La Paz, Tarija, Cochabamba, entre otras, con el fin de encontrar nuevos puntos comerciales.

El objetivo de Café Martínez es integral, por lo que está trabajando en otros canales de venta, con el fin de distribuir sus productos en los diferentes mercados como supermercados, hoteles, colegios y facultades.

CAFRAN

Esta entidad se ha creado para proteger y promover los intereses del sector franquicias en Bolivia, y promover mejores prácticas que regulen y protejan el sistema de franquicias. 

“Nuestra visión es aglutinar y representar a todas empresas que operan bajo el concepto de franquicia, convirtiéndonos en la mejor institución boliviana referente para el negocio de franquicias”, destaca su presidente.

Explica que también hay franquicias bolivianas como Pollos Copacabana, Hamburguesa Toby, Natulife, La Casa del Camba y empanadas Wist’upiku, que han llegado a Estados Unidos y otras franquicias de servicio como Franquicias América o el Estudio de Abogados Ratio Legis, que también está operando en Paraguay.

DIFERENCIAS

Una cadena es cuando una empresa matriz posee todas las ubicaciones de la empresa y asume todo el riesgo por sí misma, financiándose el proyecto de expansión y encargándose de toda la gestión; 

Por otra parte, cuando la empresa vende franquicias, vende su sistema de negocio probado y marca a inversionistas, pasando parte del riesgo a otros inversores. 

Sin embargo, si una franquicia no funciona con los estándares establecidos por el franquiciador, puede afectar negativamente a la marca en general, por eso se exige un mayor control de calidad en las franquicias.