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Ing. Gonzalo César Landaeta*

El verdadero valor de la capacitación

Un aspecto fundamental en cualquier curso, taller, seminario, conferencia o actividad de capacitación, es que al margen de ser entretenida, genere un verdadero aporte a quien participa, y eso es posible únicamente cuando la persona a cargo no sólo tiene sólidos conocimientos conceptuales que compartirá con su audiencia.

De un tiempo a esta parte he podido notar con bastante preocupación, que cada vez más personas comienzan a dedicarse a la capacitación de recursos humanos.

Y cabe aclarar que la preocupación no viene por el lado de pensar que puede existir más competencia, porque en primer lugar, el mercado es lo suficientemente grande como para que todos quienes deseen llevar a cabo esta importante labor puedan hacerlo y, segundo, porque una competencia de verdad, siempre es algo positivo para no dormirse, para seguir innovando y continuar desarrollando nuevas posibilidades.

El verdadero problema es que como dice el viejo refrán, en tierra de ciegos, el tuerto es rey. Y eso, aplicado a algo tan importante como lo es la capacitación y la formación de recursos humanos, hace que cualquier persona con un mínimo de conocimiento, crea que puede ocuparse de capacitar a otros que saben menos que ellos, lo cual a la larga más que un beneficio, genera un verdadero perjuicio a quien toma esos cursos, porque pierden tiempo y dinero.

Hoy en día las empresas pelean palmo a palmo por ganar mayores porciones de mercado, y su activo más importante son las personas que conforman su equipo humano, que es en definitiva quien toma contacto con clientes, compradores y prospectos todo el tiempo.

Cuando alguien percibe que la persona que tiene enfrente, no le brinda la atención esperada o no cuenta con la formación adecuada, inmediatamente se hace una idea de cómo es la empresa, lo cual puede repercutir muy negativamente en los resultados no sólo de ese momento, sino de lo que esa persona pueda hablar y comentar con su entorno, ya que hoy día los consumidores comparten cada vez más sus percepciones y experiencias con los demás, a través de las redes sociales principalmente.

He ahí la gran importancia de dotar al personal del conocimiento y herramientas necesarias, para que puedan reflexionar y tomar conciencia sobre las diversas situaciones que les toca vivir a diario y, fundamentalmente, para que sean capaces de asumir el compromiso y la verdadera responsabilidad en cada una de sus tareas, sin desligarse o delegar a otros lo que podrían resolver por sí mismos, si contaran con la formación apropiada. 

Un aspecto fundamental en cualquier curso, taller, seminario, conferencia o actividad de capacitación, es que al margen de ser entretenida, genere un verdadero aporte a quien participa, y eso es posible únicamente cuando la persona a cargo no sólo tiene sólidos conocimientos conceptuales que compartirá con su audiencia, lo cual siempre es importante, sino que además haya vivido y experimentado lo que explicará, porque de lo contrario, queda en una simple exposición teórica, que posteriormente difícilmente pueda llevarse a la práctica.

El tema es que con la democratización del acceso a internet, cualquier persona tiene la posibilidad de acceder a millones de sitios en los cuales puede obtener información de todo tipo, sobre todos los temas posibles.

Pero la realidad es que contar con el soporte de expertos en la materia, que justamente son expertos gracias a su experiencia (la RAE: Real Academia Española, define a experto como una persona experimentada en algo, especializada o con grandes conocimientos en una materia), permiten asimilar de manera más rápida y sencilla, los conocimientos que se desean y necesitan aplicar en el día a día.

Este aspecto es vital y no siempre se toma en cuenta en nuestro medio, ya que parecería que muchas personas encargadas de solicitar y evaluar propuestas de capacitación, sólo miran el contenido temático y el precio, sin considerar el expertise del proponente. De hecho, hace un par de días mientras me disponía a escribir este artículo, casualmente una organización contactó a mi empresa para pedir una propuesta de capacitación en atención a clientes, y luego de revisar las diferentes alternativas que había recibido, nos contactaron para preguntarnos si podíamos hacer una rebaja en el precio, ya que según ellos, todas las  propuestas tenían el mismo contenido y “sólo” variaban en el precio. Gran ejemplo de cómo el papel soporta todo.

Con más de 22 años de experiencia encima, y miles de personas capacitadas, una sugerencia que siempre hago, más allá de a quién elija para asumir la responsabilidad de su formación, es que primero tenga claro por qué y para qué desea capacitar a su personal. Es decir, cuál es el objetivo que busca con la capacitación, porque si sólo es por cumplir con un requisito que le exige su certificación de calidad, porque ha visto que otras empresas lo hacen, o porque tiene que ejecutar su presupuesto, no tiene mucho sentido.

El verdadero fin de la capacitación debería ser que el personal adquiera los conocimientos para mejorar sus habilidades, para potenciar sus destrezas y para que se sienta verdaderamente preparado para hacer su trabajo de forma sobresaliente. Eso aumenta la autoestima de la gente, ayuda a mejorar el clima laboral y principalmente, es la mejor forma de mostrar al mercado el grado de compromiso que se tiene con su satisfacción, porque en un mundo donde todo es cada vez más parecido, la atención que se brinda a través del personal, es lo que realmente marca la diferencia.

Un detalle no menos importante, es que la gente debe pasarla bien en las sesiones de capacitación, y por eso las dinámicas, ejercicios y todo tipo de juegos son bienvenidos, pero hay que destacar que toda dinámicas debe tener un fin concreto y una reflexión al final, de lo contrario son sólo un juego que sirve de esparcimiento y diversión, cuando en realidad lo que se debe lograr, es que la gente tome conciencia de cómo pueden aplicar lo vivido a su vida diaria, para que así las actividades sean verdaderamente provechosas.

Si desea potenciar la productividad de su personal, contáctese con SúperNova Empresarial al 4457954, contamos con un equipo de especialistas, con la formación y experiencia necesarias, a su disposición. Hasta la próxima!!

Ing. Gonzalo César Landaeta

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