Un nuevo enfoque para los proyectos de Cochabamba
Uno de los temas de mayor preocupación para los cochabambinos es la consolidación de un modelo de desarrollo socioeconómico departamental. Se han trabajado diversos modelos resultado de largos años de lucha política–social, concebidos por los empresarios, sindicatos de trabajadores y diferentes organizaciones sociales, pero que en el momento de implementarlos se han estancado sin consolidarse. Esta situación puede revertirse si se cambia de enfoque los proyectos regionales a mediano y largo plazo, bajo una sola premisa: potenciar nuestra economía y generar oportunidades de desarrollo para los cochabambinos.
El desarrollo económico es una de las bases de la soberanía, pues se trata de un conjunto de lineamientos estratégicos que no pertenecen solamente a agrupaciones individuales, sino es la convergencia de las necesidades de todos los sectores que contribuyen al crecimiento de nuestra economía regional. Una política departamental de desarrollo consulta los ideales e intereses de toda la región frente al país del que forma parte indivisible. Esos ideales e intereses se concretan en su «autonomía», que no significa aislamiento o antagonismo frente a otras, sino una interdependencia en términos de igualdad.
Protagonismo
Existe consenso regional en la necesidad de potenciar nuestras industrias y emprendimientos, por lo que se debe mirar hacia el sector privado de otra manera generando ecosistemas que promuevan la creación de nuevas empresas y mayores fuentes de empleo y oportunidades. Es cierto que el ecosistema empresarial que tenemos en Bolivia no es el óptimo, pero es necesario apostar por otras alternativas de desarrollo potenciando las fortalezas regionales, fundamentalmente con enfoque en los emprendimientos, no estamos lejos de pensar en una «Ley de Emprendimiento» o una «Ley de Hospitales de Empresas» como pilares estructurales de un nuevo marco normativo para fomentar el emprendimiento en nuestro departamento bajo la visión de un Estado conciliador y no interventor, y de un «empresariado» impulsor de un ecosistema empresarial adecuado a los nuevos tiempos, asumiendo un rol protagónico en el desarrollo de las regiones.
La Cámara de Comercio y Servicios de Cochabamba ha identificado algunos sectores estratégicos de nuestra economía regional: salud, educación, gastronomía y desarrollo de software. Sin embargo, hay otros sectores potenciales en donde también el Estado puede tener participación que le genere rentabilidad a su inversión, como ser el sector hidrocarburífero, minería, manufactura y agrícola. Surge la pregunta: con tanta potencialidad, ¿cuál debe ser el nuevo enfoque en los proyectos de desarrollo de Cochabamba?
Polos de desarrollo
El enfoque de «Polos de Desarrollo» es una propuesta pensada en la disponibilidad de recursos físicos y humanos que tenemos en Cochabamba, eso hay que aprovecharlo y la mejor manera es agregando valor a dichos recursos.
La idea central en generar una sinergia entre la inversión privada de nuestros empresarios, traducida en el ecosistema empresarial que mencionamos, la inversión pública en infraestructura y servicios, la transferencia tecnológica de nuestras universidades y la mano de obra calificada de los sectores profesionales, obreros y comunidades campesinas.
Contando con profesionales tan competentes en áreas de salud, educación, servicios tecnológicos y gastronómicos, unido al reconocido espíritu emprendedor que tiene el cochabambino y el empuje que tienen nuestros obreros y campesinos para sacar adelante a sus familias y comunidades, son los insumos para transformar nuestro departamento en un referente nacional de crecimiento.
Para aplicar este modelo, se requiere consenso político y social concretando pactos entre los diferentes sectores en torno a una sola hoja de ruta. La participación del Estado con una Gobernación y municipios más propositivos que receptivos, un empresariado dinámico e inclusivo que desarrolle proyectos con una visión empresarial, Universidades e Institutos que desarrollen tecnología y ciencia para potenciar a nuestras empresas públicas y privadas, y obreros y campesinos dispuestos a redoblar esfuerzos para superar el déficit de productividad que tenemos en el departamento. La meta es lograr que el crecimiento regional beneficie a todos, una economía departamental dinámica, eficiente e inclusiva con igualdad de oportunidades para todos.
Daniel Escalera - Hugo Pérez Directores Cámara de Comercio y Servicios de Cochabamba