AVICULTORES GARANTIZARON EL ABASTECIMIENTO DE HUEVO Y POLLO PESE A LA FALTA DE CRECIMIENTO DEL SECTOR DURANTE EL 2020
Debido a la cuarentena por la pandemia del COVID-19 y al fluctuante comportamiento de los precios de los productos del mercado, el sector avícola continúa con el estancamiento en su crecimiento. Según el presidente de la Asociación de Avicultores de Santa Cruz (ADA), Ricardo Alandia, durante el 2020 los productores llegaron a perder gran parte de su capital, pese a esto se abasteció el mercado oportunamente.
“El impacto de la pandemia del COVID-19 y las medidas de confinamiento rígido que se adoptaron para contenerla, ocasionaron serios problemas a la avicultura. El productor avícola tuvo que sostener su producción con una economía realmente afectada”, acotó.
El titular de ADA señaló que el rubro de pollos de engorde se vio más afectado en el periodo de marzo a julio debido al cierre de los mercados por la cuarentena, esto produjo “una caída de precios a niveles históricos”. Sumado a esto, los insumos como el maíz y la soya incrementaron sus precios afectando al costo de producción en las granjas avícolas.
Por otra parte, Alandia manifestó que la producción de huevos gozó de un incremento en la demanda durante la cuarentena rígida, esto por ser un alimento indispensable para la canasta familiar y económico. Sin embargo, durante el último trimestre del año la situación cambió y los precios se vieron afectados negativamente.
“El sector productor de huevo también se encuentra en un estancamiento de su desarrollo, demostrado fácilmente con los valores de importación de genética los cuales muestra en crecimiento significativo respecto a la gestión anterior, pero lento si analizamos los últimos años”, explicó Alandia. La producción de huevos este 2020 asciende a 2.200 millones, con una disminución de la oferta de un 5% en comparación al 2019 donde la producción fue de 2.300 millones.
Finalmente, Alandia expresó que las perspectivas actuales no son las mejores para el sector avícola y que es necesario trabajar en una planificación de la producción con el objeto de que exista un equilibrio entre la oferta y la demanda para alcanzar un precio estable, a fin de que los productores puedan proyectar adecuadamente su crecimiento cubriendo la demanda interna y posteriormente la externa.